Papa a la Huancaina

COnversaba con un amigo acerca de lo lleno que esta el centro de restaurantes peruanos, pequeños, precarios, mal agestados, definitvamente feos. La pregunta que yo me hacia era ¿Por qué habiendo tanto peruano en Chile, no estamos invadidos por su respetada buena mesa?, mi amigo me contestaba raudo "Lo que pasa es que los peruanos que hay en Chile son unos rascas y patipelaos", Sí tienes razón, me apresuré a contestare.

Mmmm... pero es así?, es esa la razón?, es cierto que la mayoria de los peruanos que llegan a Chile son de estratos bajos, en busca de cualquier empleo: nanas, obrero, junior, garzón, etc. No son lo que podría llamarse el prototipo del empresario gastronomico, o del emprendedor visionario, pero no creo que ese sea el real problema. El real problema tiene que ver con nosotros, con la "desconfianza del chileno", cn nuestra incapacidad para ver oportunidades en otras personas, para meternos en sus costumbres, en sus formas de ver la vida. Qué importa que los tipos sean pobres, no hablen como uno, no coman lo mismo que uno, si al final hay una riqueza que nos saben (o no pueden) explotar. Cuántos ejemplos hay de estos, que viendo el valor que se podría generar para otros, la oportunidad, no damos el paso porque el otro no es como uno??